LG y la orquesta vegetal de Londres se asocian a favor de la conservación de los alimentos
En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, LG desarrolló una particular iniciativa vinculada con el arte y se asoció con la Orquesta Vegetal de Londres para contrarrestar el problema de desperdicio de alimentos y demostrar cómo la tecnología avanzada de los refrigeradores puede ayudar a prolongar la vida de los alimentos manteniéndolos frescos por semanas o meses.
La orquesta ha entretenido a los amantes de la música británica con sus instrumentos construidos con calabazas, pimientos, raíces de yuca, zanahorias y calabazas y debido a que sus actuaciones dependen de la capacidad de generar sonidos precisos con sus instrumentos, los músicos se ven obligados a crear nuevos instrumentos cada día con verduras frescas al no poder conservarse adecuadamente y no ayudarlos con la reproducción adecuada de los sonidos de los vegetales.
Frente a ello, los músicos colocaron sus instrumentos en las refrigeradores LG con tecnología Inverter Linear Compressor y comprobaron su efectividad al no percibir ninguna diferencia en el sonido incluso después de una semana en almacenaje de dichos instrumentos. Esto quiere decir que la variación de sonido está vinculado directamente con el factor de prescura y dicha tecnología Inverte de LG no solo mantiene los alimentos frescos por más tiempo, sino que utiliza menos energía y con menos ruido en su funcionamiento.
La marca señala que para obtener el máximo beneficio de la tecnología de refrigeración para conservar los alimentos, las refrigeradoras deben estar aislados de las temperaturas ambientales fluctuantes que pueden alterar la temperatura interior de las mismas. La temperatura cambiante dentro del refrigerador tiene el impacto más grande en la vida útil de la comida, más que la frialdad del refrigerador sí mismo.
Cabe señalar que el desperdicio de alimentos es uno de los mayores retos en estos tiempos. Según las Naciones Unidas, hasta un tercio de toda la comida se echa a perder o se desperdicia antes de que se consuma. Aproximadamente, un tercio de los alimentos producidos en el mundo para consumo humano cada año, es decir, alrededor de 1.300 millones de toneladas se pierde, lo que equivale aproximadamente a 680.000 billones de dólares en los países industrializados y 310.000 billones de dólares en los países en desarrollo.1 Además, las frutas y hortalizas tienen las tasas más elevadas de desperdicio debido a su rápida tasa de deterioro y la falta de conservantes artificiales.
