El enfoque humano en la Transformación Digital
En un entorno laboral confluyen colaboradores de diferentes generaciones, algunos corresponden al perfil de los Baby Boomers, Generación X y Millenials, cada uno con sus particularidades en cuanto a la adaptación y fluidez con los entornos digitales del mundo actual.
En un ambiente como ese, los líderes de las fuerzas laborales se preguntan continuamente, ¿cómo guiar a un equipo así de heterogéneo hacia algo tan necesario como la transformación digital?
En principio, recordemos que por transformación digital entendemos todo el ecosistema basado en tecnologías de la información y comunicación que, a través de dispositivos y tecnologías específicas para el entorno empresarial, nos permiten desarrollar nuevas dinámicas laborales como el trabajo móvil, es decir, aquel que se rige por resultados y no por un cumplimiento anacrónico de ocho horas sentado en un escritorio en una locación específica.
¿Qué valores transversales resaltar para ‘vender’ este esquema? ¿Cómo hacer sentir a los de más edad que no están perdiendo un puesto fijo de trabajo, sino que están ganando flexibilidad de horarios para tener una vida profesional y personal más balanceada?
La Transformación digital debe empezar desde el plan de negocio y de ahí expandirse a los otros ámbitos como la cultura, la manera de presentar la empresa y la forma en cómo contratar. No puede haber aislamiento del negocio, por lo tanto, hay que replantearnos desde el reclutamiento hasta la forma de ver al candidato.
De hecho, los colaboradores ya están solicitando a las mismas empresas dar una mirada diferente a la forma de trabajar. Según un estudio denominado “El trabajador digital, qué busca y cómo trabaja” desarrollado por nuestra empresa Citrix a nivel de Latinoamérica, indica que el 45% de los trabajadores cambiaría su empleo actual por otro que le permita trabajar de manera remota. Asimismo, un 39% prefiere no tener que cumplir un horario fijo y desean que las empresas midan su productividad a través de objetivos.
La empresa Deloitte también desarrolló un estudio “Reescribiendo las reglas para la era digital” (2017), en el cual los departamentos de recursos humanos se están enfocando en mejorar y entender la experiencia integral de los trabajadores. De hecho, el 80% de los ejecutivos encuestados para este informe señalaron que la experiencia del empleado era muy importante (42%) o importante (38%), aunque solo el 22% reportó que considera a sus compañías como excelentes en la construcción de una experiencia del empleado.
En esa misma línea, un 59% de los participantes consideró que no se encontraba preparado, o lo estaba muy poco, para abordar el desafío de la transformación digital.
Hay que reconocer por tanto que no estamos ante una ciencia exacta, sino ante un proceso gradual que debe considerar a cada empresa en sus diversas realidades.
Para empezar, podemos familiarizarlos con la nube, destacando su evolución y los niveles de seguridad que se han ido alcanzando en los últimos años para hacer de esta tecnología una herramienta sólida en el ámbito de los negocios. También es recomendable que las empresas cuenten con determinadas tecnologías como la virtualización de aplicaciones y escritorios, compartición de archivos y soluciones de Gestión de Dispositivos Móviles (MDM por sus siglas en inglés) que permiten soportar el trabajo móvil y acceder a los recursos de la empresa desde cualquier lugar y en cualquier momento.
En un mundo de tanta presión y desgaste como el actual, ¿cómo no apreciar esa posibilidad? Los mayores sin duda serán permeables a este argumento que les permitirá dosificar sus energías, y los más jóvenes encontrarán una veta maravillosa para dar rienda suelta en esa libertad a sus otros múltiples intereses.
El camino está trazado por la tecnología, solo hay que saber guiar a nuestra gente a través de él.