Reinventarse, la clave del éxito de las empresas disruptivas que están cambiando al mundo
En los últimos cincuenta años, los avances tecnológicos vienen cambiando la forma de hacer negocios en el mundo. Cada vez son más las start-ups o empresas disruptivas que rompen con los modelos tradicionales y toman el lugar de aquellas compañías que no supieron reinventarse. Otras marcas han logrado mantener su liderazgo invirtiendo una parte importante de su facturación en investigación y desarrollo, así lo explicó Maximiliano López, ejecutivo de cuentas de Canal y Enterprice de Intel, quien recientemente dictó un seminario en la sede central de SENATI
“Entre el 2017 y el 2018, marcas como Amazon, Google, Samsung, Intel, Microsoft y Apple, invirtieron, en investigación y desarrollo de nuevos productos, alrededor de 76.4 billones de dólares, un monto cercano al PBI de Uruguay”, destacó el especialista para evidenciar la trascendencia de la innovación en la era digital, donde nuevas herramientas como Inteligencia Artificial, realidad virtual aumentada e inmersiva, y otras en proceso de implementación, como conectividad 5G y autos autónomos, generarán cambios disruptivos a nivel global.
“Al cierre de este año, se prevé que el 45 % de los ingresos de las empresas transformadas digitalmente provendrán de nuevos modelos comerciales. Además, estudios indican que el 38 % de los empleos que las personas realizarán en los próximos doce años aún no se han inventado”, apuntó López.
Entre las empresas innovadoras más conocidas por generar ingresos millonarios a partir de la disrupción de modelos de negocios tradicionales, el especialista de Intel mencionó a Netflix, Spotify, Uber, Glovo y Airbnb. Al respecto, resaltó que no hace falta contar con el soporte de una gran compañía para ser exitoso, sino ser capaz de detectar una necesidad y utilizar los recursos que ofrece la tecnología para reinventar ese servicio o esa experiencia.
Finalmente, López destacó el rol de los especialistas en Big Data, en un contexto en el que toda la tecnología que se incorpora a la vida de las personas continuará generando datos. “En un día, un hospital genera tres mil gigabytes de datos, mientras que un avión o una fábrica, generan cuarenta mil y un millón de gigabytes, respectivamente. ¿Qué se va a hacer con esa información? El experto en Big Data es el que debe filtrar y determinar qué es lo que sirve y lo que no”.
