I.N.O.X. Steel, un reloj con función insuperable
En la historia de Victorinox Swiss Army, I.N.O.X. marca un antes y un después, un reloj ultra resistente que avanza con fuerza en el mundo de la relojería y abre nuevas vías de expresión. I.N.O.X. sigue los pasos de su predecesora, la emblemática navaja suiza. Su perfección es el resultado de los detalles estéticos y técnicos: 130 pruebas de resistencia, proporciones perfectas, tacto suave y sedoso. Su característico bisel hexagonal —en parte pulido, en parte satinado— parece tallado con navaja y confiere una fuerte personalidad y solidez.
I.N.O.X. encarna a la perfección la tenacidad de Victorinox Swiss Army, que exige que sus relojes cumplan con una serie de 130 requisitos en forma de pruebas de resistencia. Sus ingenieros trabajan con una precisión de micrómetros. El resultado es un producto de calidad, funcional y que no pasa de moda, ideal para todos los estilos de vida.
Por su parte, el brazalete de acero, presentado este año, es un logro mayúsculo. Dotarlo de las mismas características que la caja, de modo que también resistiera a las 130 pruebas, ha supuesto 2 años de investigación y desarrollo. La calidad y la funcionalidad del brazalete son fruto de un diseño ingenioso y de un cuidado extremo de la estética. Su resistencia a las vibraciones es de 500 mil ciclos, es decir, 10 veces superior a la de un brazalete convencional. El resultado: un reloj de excelente calidad, capaz de resistir a una caída de 10 metros sobre una superficie de cemento y a una presión hidráulica constante de 8 toneladas, lo que equivale a pasar por encima con un tanque de 64 toneladas.
Sus eslabones en “H” componen una estructura sólida y su acabado cepillado proporciona una mayor resistencia a los arañazos y un aspecto deportivo. Los bordes de los eslabones, biselados y pulidos, retoman la estética del bisel. El dominio del proceso industrial de fabricación permite a Victorinox ofrecer un brazalete con unos acabados de gama alta a un precio asequible.
El I.N.O.X. Steel se apoya en los pilares del estilo de Victorinox -fuerza, intemporalidad, confianza, versatilidad y funcionalidad- para conseguir el objetivo primordial del diseño, esto es, ofrecer un artículo de calidad, asequible, que guste a la mayoría y sea útil en cualquier circunstancia.