Los smartphones de realme poseen nuevo estándar de calidad pensando en el usuario joven
En la actualidad, los smartphones se han convertido en los equipos fundamentales para las vidas de cientos de personas, y es que, no solo permiten mantenerse comunicados, sino que hacen que todo sea más útil y eficiente. Por ello, al momento de adquirir un equipo móvil, además de fijarse en las características y precios, también se debe tener en cuenta el sistema operativo que garantiza su correcto funcionamiento, acceso a varias aplicaciones y, por ende, que el equipo sea de buena calidad.
Pensando en ello, realme, el gigante de la tecnología especializado en el desarrollo de equipos móviles, wearables y su aliado TÜV Rheinland, empresa global dedicada a la certificación e inspección de calidad para productos, procesos y servicios, presentan un nuevo estándar de calidad de smartphones con la denominación Certificación de Alta Confiabilidad para Smartphones de TÜV Rheinland.
La nueva certificación tiene un periodo de duración de los tres primeros años de vida de los dispositivos móviles y el proceso de investigación duró ocho meses, que incluyó el uso, hábitos y costumbres de usuarios jóvenes.
EQUIPOS EN MERCADO LOCAL CON CERTIFICACIÓN DE CALIDAD
Por eso, la marca realme, con la intención de llevar la mejor tecnología del mundo, ingresó al mercado peruano con sus modelos 7Pro y realme 7 que cuentan con el sello de TÜV Rheinland que certifica su alta confiabilidad luego de superar 23 pruebas principales y 38 test secundarios.
CALIDAD PENSADA EN LOS NATIVOS DIGITALES
Teniendo en cuenta que los tiempos han cambiado y que muchos jóvenes realizan distintas actividades en diferentes escenarios, la marca realme, pensando siempre en ofrecer un producto de calidad, realiza los tests más extremos en posibles situaciones en los que puedan estar los jóvenes usuarios. Es así que, Realme ha sometido a sus equipos a caídas accidentales desde alturas superiores a los 1.8 metros, desde todos los ángulos posibles y sobre todo tipo de superficies, e inclusive, a cambios de temperatura que van desde los 40 grados Celsius hasta los 75 grados para asegurar que sus equipos sobrevivan a esas condiciones.